Con la llegada del otoño, el paisaje se transforma, y nuestra bodega vive un momento crucial de transición. Las hojas de las vides, que han sido de un verde intenso durante la mayor parte del año, comienzan a cambiar de color, pasando a tonalidades doradas, rojas y anaranjadas, como si la naturaleza misma celebrara un ciclo que está por cerrarse. Este proceso no solo es una maravilla visual, sino que tiene una importancia profunda para el futuro de nuestros vinos.
El otoño marca el final de un ciclo en la viña, cuando las uvas ya han alcanzado su madurez óptima y están listas para ser cosechadas. Es un momento de reflexión y trabajo para todo el equipo de la bodega, porque todo lo que hemos cultivado durante la primavera y el verano llega a su punto culminante. La transformación de las hojas refleja lo que ocurre dentro de las vides: la planta empieza a concentrar sus energías, a despedirse de lo que fue, y a preparar sus raíces para el descanso del invierno.
Este cambio en la vegetación también nos habla del equilibrio que encontramos en la naturaleza. Las hojas que se tornan doradas, antes de caer al suelo, enriquecen la tierra, aportando nutrientes esenciales para la próxima temporada. Es una danza constante entre el trabajo de la planta, la tierra y el tiempo, que culmina en una cosecha cargada de sabor y esencia. El otoño es cuando los esfuerzos del año se materializan, y el vino empieza a tomar forma.
En nuestra bodega, cada vendimia es una celebración del ciclo natural, y el otoño, con su transición tan notable, es el recordatorio de que todo tiene su tiempo. Así como las hojas caen para renovar la tierra, nuestras vinas también renuevan su fuerza para seguir creciendo y dando lo mejor en cada cosecha. Sin duda, el otoño no es solo una estación, es el momento de cierre y comienzo en cada botella que creamos.
Este cambio en el paisaje no solo es una maravilla visual, sino que también es un recordatorio de la armonía y el respeto con que trabajamos la tierra, siempre mirando hacia un futuro lleno de nuevas cosechas y nuevos vinos.
